En el año 1209 el Papa Inocencio III le besó los pies maravillado por la inmensidad de su humildad, bondad y nobleza a San Francisco De Asís, fundador de la orden Franciscana, la cual ha recorrido el mundo entero, en su labor de evangelizar a los pueblos.
Y debido a su labor un grupo de Franciscanos se establecieron en Naiguatá, estado Vargas y decretaron que San Francisco de Asís, fuese el santo patrono del lugar, que se llamaría entonces San Francisco de Naiguatá.
El pueblo Naiguatareño es muy consecuente en sus actividades culturales. Es por eso, que inicia la manifestación con cohetes, para luego celebrar la eucaristía acompañada dentro de la iglesia, por la agrupación fulía, canto y la parranda de Goyito. Luego, al final de la misa, en la bella plaza, varios grupos de música y danza ofrecen su agradecimiento al santo a través de su arte.
Una curiosidad que llama mucho la atención, es que el campanario de la iglesia de la Coromoto suena sus campanas al ritmo de parranda. Ese es el sentir de Naiguatá, así como el joropo es el sentir del llanero, o la gaita de furro del zuliano. La parranda y el tambor son la expresión genuina de su idiosincrasia. El Naiguatareño celebra una gran cantidad de manifestaciones y tradiciones, y todas están presentes en los tambores y las parrandas del lugar.
Afuera en la plaza despliegan un afiche inmenso de la imagen de San Francisco y al ritmo de la música, los lugareños celebran el día de su santo bailando y compartiendo durante toda la tarde. Aproximadamente a las 6:00 a.m. vuelven los repiques del campanario y los cohetes, anunciando la salida de la imagen de San Francisco de la iglesia para iniciar la procesión.
Un numeroso grupo de gente acompaña la imagen por las calles principales pueblo arriba. Durante el recorrido se reza el rosario y se le cantan canciones litúrgicas. Entrada la noche regresa la imagen a la iglesia para ser colocada en un nicho arreglado con flores para la ocasión. Después de concluir las celebraciones en honor a su patrono, las personas finalmente se van a descansar.
Aunque este año el 4 de octubre cayó miércoles, la parranda comenzó con toda la fuerza de la expresión naiguatarense. Las personas bailaron y cantaron durante horas, manifestaron lo que sentían por ser hijos de esa tierra, ya que sus fiestas y celebraciones, son muy importantes en sus vidas. La mayoría de los habitantes participaron en cada tradición, y lo más importante fue ver lo orgullosos que se sienten de mantener sus costumbres y tradiciones, reflejando la grandeza de su pueblo.
"Naiguatá, pueblo turístico y religioso, de gente alegre y amante de la naturaleza, fue fundado el 4 de octubre de 1710 con el nombre de San Francisco de Asís de Naiguatá".
Para concluir puedo decirles que una vez que lo visiten, no se querrán marchar, porque es un lugar que atrapa, y siempre van a querer volver.
(Fuente: El Universal)
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